La gran mayoría de las madres consideran la leche de vaca como un alimento irremplazable en la dieta rutinaria de sus hijos. Sin embargo, pueden presentarse problemas de salud debido a las sensibilidades, alergias alimentarias e intolerancia a la lactosa que causan la leche de vaca. Es por esta razón que es conveniente utilizar la #Dieta3R, comenzando por REMOVER de la dieta de los hijos la leche de vaca y derivados. Las complicaciones que se originan incluyen: diarrea, dermatitis atópica, urticarias, flatulencias, vómitos, estreñimiento, producción excesiva de mocos, enfermedades autoinmunes, entre otros.

Existe la creencia de que la única fuente de calcio para los hijos son los lácteos, sin embargo esto no es así, ya que existen otros alimentos que proporcionan este nutriente que inclusive son de mayor y mejor asimilación que el de la leche y sus derivados. Debes REPONER con: sardinas, mejillones, espinacas, col rizada, perejil, frutos secos (almendras, higos, nueces de Brasil, avellanas), semillas de sésamo, caraotas, naranjas, lechosa, y col china.

Esta manifestación ocurre por las siguientes causas:

  • Intolerancia a la lactosa

    : Se caracteriza por una falla enzimática para digerir el azúcar de la leche (lactasa), produciendo una inflamación intestinal, la cual viene dada por varios factores: genéticos, desbalances nutricionales, y uso excesivos de medicamentos (AINES, antibióticos)

  • Sensibilidad a la caseína u otras proteínas de la leche: Es principalmente un problema inmunológico (IgG) de una reacción tardía.

  • Alergia a la caseína u otras proteínas de la leche

    : Es una reacción inmediata ocasionada por IgE.

Con la finalidad de precisar si la supresión de la leche de vaca será temporal o permanente en la dieta de sus hijos, es recomendable realizar exámenes específicos de sangre e identificar el caso.

  • En el caso de presentar intolerancia a la lactosa: Podemos incluir alimentos con menos del 1.8 % de lactosa (leches deslactosadas, leches o quesos de cabra, oveja o búfala, yogures).
  • Si existe sensibilidad alimentaria: Eliminar todos los lácteos por el tiempo determinado en el resultado del examen de sensibilidad, para luego incluirlos paulatinamente con una dieta de rotación, debidamente indicada por su nutricionista.
  • En el caso de presentar alergia: Eliminar en su totalidad los lácteos y derivados, buscando la fuente de calcio en los alimentos anteriormente indicados.

En conclusión, si seguimos este protocolo se logrará RECUPERAR la salud de sus hijos. Se verán mejoras en el sistema inmunológico, habrá mejor absorción de nutrientes, se fortalecerá el sistema digestivo, y por ende de su hijo crecerá sano y no padecerá de enfermedades a futuro.

Recuerda que nuestras amigas de Nutriwhite pueden asesorarte en identificar si lo que padeces es alergia, sensibilidad o intolerancia alimentaria. Contacta con ellas al siguiente email para tu asesoría personalizada.

Articulo realizado por nuestra colaboradora: Lic. Andreina White de Nutriwhite (Master en Inmunología y Metabolismo, especialista en trastornos digestivos)
Nutriwhite: Especialistas en inmuno-nutrición: Identificamos sensibilidades alimentarias y diseñamos una dieta para cada quien. Tratamos cualquier trastorno relacionado con el sistema digestivo, inmunológico y metabólico.)