En Espai Boisà somos partidarios del concepto Teambuilding. Después de haberlo hablado mucho decidimos poner esta filosofía en marcha. Nuestro equipo de siete se montó en una furgoneta, dirección: el Penedès.
El día estaba soleado y estábamos en camino para una salida eco-gastronómica sorpresa. Más tarde descubriríamos que íbamos a conocer dos proveedores del Espai Boisà, L´Hort de la Carmeta y Caves Bolet.
Después de pasar por una carretera sinuosa rodeada por viñedos y con vistas espectaculares, llegamos a la finca de Xavier Solé en Castellví de la Marca (Barcelona).
La familia Solé-Gallego viene de una tradición de agricultores que se remonta al año 1614. L’Hort de la Carmeta fue creado en 2009 para rejuvenecer la propiedad de la familia la cual antes se dedicaba sólo al olivo. L´Hort de la Carmeta nace con el objetivo de poder vender sus productos de una forma más directa al consumidor. La empresa tiene el nombre de la madre de Xavier, quien dedicó toda su vida al campo.
Al llegar a la masía, Xavier nos dio la bienvenida, invitándonos a sentarnos en una mesa de madera rodeada por viñedos y cebollas recién cultivadas. Mientras nos sentábamos, Carmeta nos llevó un montón de platos llenos de cosas típicas para desayunar en Cataluña, todo hecho con ingredientes frescos del huerto, como tomates ecológicos, embutidos, tortilla de patata, tortilla de berejena, cebolla y patata, vino blanco ecológico hecho en la finca, y para terminar, un pa de pessic (pan de anís). Mientras comíamos Xavier nos explicó su visión de lo que significa ser ecológico y porque ha apostado por esta filosofía.
Todo lo que cultivan es libre de pesticidas y herbicidas, usando fertilizantes naturales hechos por los animales que viven en la finca (gallinas, conejos, cerdos, etc.). Todo el trabajo se hace manualmente, evitando el uso de maquinaría excepto en casos excepcionales. L´Hort de la Carmeta tiene la certificación del CCPAE y también de venta y producto de proximidad.
Barrigas contentas, nuestro viaje gastronómico estaba en buen camino.
Después del desayuno, todos nos montamos en la furgoneta para visitar el campo del L´Hort de la Carmeta donde cultivan todos sus productos ecológicos antes de que lleguen al Espai Boisà para su uso en nuestras clases de cocina y eventos.
Después de visitar la finca, era hora de despedirnos y seguir el camino de la aventura.
Llegando a la bodega de Cavas Bolet, nos dimos cuenta que la siguiente actividad iba a ser una visita enoturística.
Empezamos por un tour en las instalaciones donde el enólogo de la familia, Xavier, nos enseñó el proceso de la elaboración de vinos. En la bodega, construida en 1619, vimos todas las herramientas que usaban en aquella época. Al lado de la casa principal había la casa modernista, construida en 1911. De ahí seguimos el proceso de los vinos del inicio hasta su finalización.
Terminamos con una cata de vinos donde catamos tres vinos ecológicos distintos, elaborados por la bodega; dos vinos blancos (Xarel·lo y Muscat Gewürztraminer) y el Cava Brut Rosado que tiene crianza en rima en contacto con las levaduras durante un mínimo de 15 meses.
Cavas Bolet tiene una producción bastante prolífica con un total de variedades, seis de los cuales son cavas y siete de ellos, vinos rojos y blancos. Las 66 hectáreas de viñedos están bajo la denominación de origen del Penedès y D.O Cava.
Después de la cataen caves bolet disfrutamos de dos ensaladas deliciosas preparadas por Gonzalo Martinez, el chef residente Slow Food del Espai Boisà: una ensalada de lentejas con salsa de cacahuetes y vegetales crudos picaditos y también una ensalada verde fresca de olivas, queso fresco, tomate, pepino, lechuga ecológica con una salsa de tomates secos.
Con las pilas cargadas, nos llevaron fuera donde nos esperaban Segways. Uno por uno, el guía nos orientó como usar el aparato y nos colocó los cascos.
Después de dar una vuelta en Segway por la casa, salimos por el terreno más riguroso, los viñedos. Soplaba el viento mientras paseamos por los viñedos con vistas espectaculares de montañas, iglesias, y el mar Mediterráneo en la distancia.
Después de una hora y media paseándonos por el campo, llegamos de nuevo a la bodega. Comimos un melón exquisito y jugoso que nos dio L´Hort de la Carmeta, que era el perfecto complemento a un día espectacular en el campo.
De ahí dimos las gracias a Xavier y nuestro guía de Segway y de nuevo nos montamos en el coche, esta vez en dirección Barcelona, después de haber pasado una jornada eco-gastronómica increíble.
¡Gracias a Pep y a Claudia, los promotores del Espai Boisà por haber organizado esta gran salida al campo!
¿Te gustaría vivir esta experiencia? Contáctanos: info@espaiboisa.com
By: Jessica Freedman, Masters student in Touristic Innovation with specialty in Culinary and Gastronomic Heritage